“Paraguay es un país donde el 80% de la tierra tiene el 2 % de la población”, según datos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), comentó a Radio Fe y Alegría la investigadora Mirta Barreto.
En ese sentido señaló que del 2 % de estas tierras mayoritariamente se encuentra en manos de extranjeros.
“El modelo de producción agroexportador es un modelo altamente excluyente, beneficia a muy poca gente y excluye a demasiada gente, utiliza muchísima tierra y no emplea mano de obra”, explicó Barreto.
Este modelo de producción expulsa los campesinos del campo, dijo.
El modelo de tenencia de la tierra y la propiedad no funciona, sostiene. El modelo individual de la tierra no funciona para el pobre porque no puede resistir el avasallamiento del modelo de producción agroexportador.
Sostiene que “la tierra tiene que ser asociativa” debido a que es una manera de atar la tierra contra la especulación.
La especulación de la tierra y la falta de tierras para los campesinos son las principales problemáticas que aqueja al campo, indicó.
La tierra sigue siendo una cuestión que implica decisiones políticas importantes a la hora de hablar de la redistribución de las tierras, manifestó Barreto al referirse a la reforma agraria.
